Viajes de papel. Magdalena. Historias de Colombia de Wade Davis
Felipe Gomez
El río grande de la Magdalena recorre Colombia a través de mas de 1500 km, desde su nacimiento en el departamento del Huila hasta su desembocadura en el Caribe. Es la arteria principal de un territorio complejo y de difícil acceso, vía de comunicación y de intercambio natural. En este relato clásico de viajes Wade Davis mezcla sus experiencias en un viaje a través del río con la historia y la cultura que lo salpica. Con una profundo conocimiento del país, al que llegó en los años 70 cuando era un joven antropólogo y etnobotánico, Davis aprovecha su extensa red de contactos para recibir de primera mano la experiencia vital de un río que ha configurado la identidad de Colombia.
A través de sus aguas el autor hace un recorrido por historia del país; la llegada de los españoles, la independencia de Simón Bolívar, el asesinato de Eliécer Gaitán, los años de la Violencia entre conservadores y liberales, Pablo Escobar y la historia del narcotráfico, Las guerrillas de las FARC el ELN o el M19, La Guerra sucia de ejército, los paramilitares y las escalofriantes AUC, el largo proceso de paz. Hay momento muy duros en el relato, los hechos de la conquista o todo lo sucedido en el Magdalena medio durante los peores años del conflicto actual por ejemplo, cuando el río era el cementerio del país y los cuerpos flotaban pudriéndose, sin nombre, y con las aves carroñeras sobre ellos. Pero el relato también es maravilloso por el amor que muchos de sus protagonistas tienen hacía sus aguas y por la fortaleza con la que afrontaron los episodios más oscuros de su historia.
El relato es un continuo canto a la protección de un río que ha sufrido demasiado; talas indiscriminadas que pretendían “civilizar el paisaje”, conseguir la madera necesaria para los vapores que lo navegaban o ampliar las grandes extensiones ganaderas en manos de unos pocos y ricos propietarios. El Magdalena, como muchos ríos del mundo, ha sufrido muchas transformaciones agresivas como las grandes construcciones que modifican su caudal o el de sus afluentes, los vertidos de la industria, una serie de sucesos trágicos que han modificado el paisaje con el que convivieron los pueblos originarios y del que ya Humboldt advirtió, a finales del siglo XVIII, que estaba sufriendo.
Las selvas de sus orillas desaparecieron y con ellas parte de su fauna. El libro, que parte como un encargo, quiere ser un llamado a su protección y en gran parte no solo por su valor natural sino también por ser el símbolo de Colombia, uno de los países con mayor diversidad de ecosistemas y de pueblos, una riqueza y una variedad que el Magdalena articulo y de la que nacieron la cumbia y muchos otros ritmos fruto de la fusión entre lo africano, los pueblos originarios y lo europeo. El Magdalena es también el río por el que navegó el General en su Laberinto de Gabriel García Márquez.
Una lectura perfecta para conocer la cruel historia y la belleza de este complejo territorio.
Wade Davis. Magdalena. Historias de Colombia. Crítica 2021